El miércoles pasado asistí a un evento organizado por el Ecosistema WITH.
Gracias Marisol Menéndez por organizarlo
Se trataba de un debate abierto sobre nuevos modelos de liderazgo, un espacio donde diferentes profesionales compartían sus experiencias, ideas y aprendizajes sobre este tema.
Quienes compartieron sus experiencias llevaban tiempo explorando el liderazgo en la práctica.
Como era de esperar, salieron los «ingredientes» más comunes asociados a este concepto.
Entre los más mencionados estaban:
- Delegar
- Colaborar
- Bienestar
- Productividad
- Aspecto social
- Escuchar
Confieso que me alegró escuchar el ingrediente del “bienestar”.
Todos ellos son esenciales, sin duda.
Pero a medida que avanzaba el evento, me volví a dar cuenta de algo clave: la teoría del liderazgo suele ser inspiradora, pero la práctica, en mi experiencia, es otra historia.
¿Liderar es solo delegar y colaborar?
Hoy en día, hablar de liderazgo va íntimamente unido al concepto de la delegación, la colaboración y la escucha activa.
Pero, ¿qué pasa cuando una situación de crisis requiere decisiones rápidas? ¿O cuando hay que marcar una dirección clara en medio de la incertidumbre?
En esos casos, lo que algunos llaman “jefear” se vuelve necesario.
Aunque el término pueda sonar poco atractivo, en realidad, no es más que una manifestación del liderazgo autocrático, que en determinados momentos puede ser imprescindible.
No todo es consenso, ni todo es imposición. Liderar es saber cuándo aplicar cada estilo.
El problema de los cursos de liderazgo
Cuando un directivo asiste a un curso de liderazgo, suele salir entusiasmado, convencido de que a partir de ese momento aplicará todo lo aprendido y cambiará su forma de dirigir.
Diría que se vive una situación muy similar a lo que ocurre en fin de año, nos llenamos de buenos propósitos, estamos entusiasmados con la esperanza de que ahora sí, esta vez lo voy a hacer.
Sin embargo, con el tiempo, ese entusiasmo se disipa.
Lo mismo suele ocurrir cuando llega el final de curso de liderazgo ¿Por qué? Porque no basta con aprender conceptos sueltos, sino que se necesita una hoja de ruta clara para implementar un liderazgo sostenible y efectivo.
¡Y mucha voluntad! No te voy a engañar.
La hoja de ruta del liderazgo
Desde mi experiencia, para ser un líder realmente eficaz dentro de una organización, tienes que trabajar en tres niveles, y en este orden:
- Autoliderazgo: antes de liderar a otros, debes aprender a liderarte a ti mismo. Esto implica desarrollar disciplina, hábitos y herramientas para gestionar el tiempo, la energía y las emociones.
- Liderazgo empresarial: debes comprender cómo funciona una empresa, cómo tomar decisiones estratégicas y cómo guiar la organización hacia sus objetivos.
- Liderazgo de personas: una vez que te lideras a ti mismo y entiendes el negocio, puedes enfocarte en inspirar, motivar y gestionar equipos de manera efectiva para que esos equipos quieran trabajar por y para ti.
Liderazgo: equilibrio entre idealismo y realidad
El liderazgo no es una receta con ingredientes fijos, ni un modelo absoluto que funcione para todos.
Es un equilibrio entre diferentes estilos, herramientas y momentos. La clave está en saber cuándo escuchar y cuándo actuar, cuándo delegar y cuándo dirigir, cuándo inspirar y cuándo exigir.
Porque, al final, liderar no es seguir un manual, sino desarrollar la capacidad de adaptación para llevar a un equipo y una empresa hacia el éxito.
¿Has pensado alguna vez en estos 3 niveles? ¿ Te sobra alguno? ¿ Añadirías alguno?
Te ayudo a que te sientas orgulloso de tu empresa alimentaria.
Más de 26 años contribuyendo a que los propietarios de empresas de alimentación se sientan satisfechos de haber conseguido esa ansiada certificación de calidad alimentaria, esa mejora productiva que necesita y esa rentabilidad que desea.
Lo hago trabajando de manera temporal como uno más dentro de tu empresa para que alcances ese logro que otros pensaban que no serías capaz o del que ya habías desistido. Se trata de una modalidad de consultoría alimentaria llevada al nivel de implantación de acciones concretas a la vez que tus trabajadores aprenden.
¿Te atreves a conseguirlo?
Contáctame por Linkedin o bien por teléfono o whatsapp en el 690 63 25 20
