Para los consumidores, desde el 13 de diciembre de 2016, va a ser más fácil poder comparar alimentos similares o bien valorar distintos alimentos desde un punto de vista nutricional. Esto es así porque a partir de esa fecha ha entrado en vigor la obligatoriedad de presentar la tabla nutricional en el etiquetado de todos los alimentos envasados y compuestos( aquellos que llevan más de un ingrediente).
Hay que decir que esto ya lo cumplían la mayoría de los alimentos antes de esa fecha; a partir de ahora tendremos información acerca del contenido en calorías y de nutrientes como proteínas, grasas totales, grasas saturadas, carbohidratos, azúcares y sal como mínimo en el 100% de los alimentos salvo los simples.
Pero también hay que decir, que a modo de efecto arrastre de esta obligatoriedad, algunos alimentos simples (huevos, carne, pescado, frutas, verduras), que no tienen obligación de incluir la información nutricional en la etiqueta, los están haciendo. Son buenas noticias.
Con esta información disponible podremos comparar alimentos similares, por ejemplo, podremos comparar unas galletas de otras. Y haciendo esto os podréis sorprender si veis unas galletas “sin azúcares añadidos” que tienen más calorías que unas galletas que no indican esa mención en el etiquetado.
También podremos comparar la composición nutricional de los alimentos ecológicos con sus homólogos convencionales. Y de esta forma puede que nos sorprendamos. Os invito a que comparéis la composición nutricional de los huevos ecológicos, o la de los camperos si no encontráis los ecológicos, con la composición nutricional de los huevos convencionales. ¿Qué os encontraréis? Una composición casi idéntica.
También os puede llamar la atención que un yogur lleve la mención “ rico en calcio” y otro similar no la lleve. Este es uno de esos casos en los cuales, posiblemente, el fabricante que no hace esta mención desconoce que podría ponerlo o simplemente nunca se ha parado a pensarlo.
Este es uno de los muchos casos en que el fabricante no hace uso de una parte de la legislación de etiquetado que es de voluntario cumplimiento lo cual suele suceder por desconocimiento, no por costes.
Respecto al formato o la manera en que se presenta esta información nutricional en el etiquetado, la legislación brinda dos posibilidades: en forma de tabla o bien en líneas ( formato lineal).
Algunos os habréis acostumbrado a ver algunos alimentos de algunas marcas en los cuales la información nutricional, adicionalmente, se presenta en forma de pilas ( esos rectángulos cuyos lados cortos son redondeados). Tenemos pilas referentes a las calorías, pilas referentes a las proteínas y así con el resto de nutrientes. En cada pila se indica el nutriente, la cantidad de ese nutriente que está contenido en el alimento y el porcentaje de las cantidades diarias recomendadas de ese nutriente necesarias para un adulto.
Esta forma de expresar la información nutricional, es decir, en forma de pilas, es voluntaria en España y en la UE. En otros países como México es obligatoria.
Me pregunto si creéis que esta información de etiquetado supone una ayuda adicional para que los consumidores nos alimentemos mejor. Me gustaría escuchar vuestros comentarios.
Autor: Esther Vázquez Carracedo directora de EV Consultoría Alimentaria.
Interim Manager para Empresas e Inddustrias Alimentarias: Desarrollo y Ejecución de Proyectos de Optimización de la Producción ( Lean Manufacturing).
Especialista en Gestión de Calidad y Seguridad Alimentaria ( APPCC, IFS, BRC, FSSC22000), Procesos de Producción de alimentos, Legislación Alimentaria, Etiquetado de Alimentos e Innovación Alimentaria.
Contacto: ev@evconsultoriaalimentaria.com o llamando al 690 632 520
[actionbox color=»primary» title=»NUEVA WEB…» description=»MÁS clara.MÁS sencilla. MÁS contenido.MÁS personal.» btn_label=»¡ VISÍTALA !» btn_link=»https://www.evconsultoriaalimentaria.com/interim-manager/» btn_color=»white» btn_size=»big» btn_icon=»link» btn_external=»0″]
