Debo de ser un poco rara.
No me acaba de convencer lo de pedir reseñas o recomendaciones para las redes sociales o la web.
No me entiendas mal, me encanta leer palabras de aprecio hacia mi persona o palabras de reconocimiento hacia mi trabajo.
Y entonces ¿por qué ?, te preguntarás.
He vivido demasiadas situaciones en las que he observado que los humanos somos seres emocionales, no siempre coherentes a la vez que tremendamente cambiantes.
Siendo así, las reseñas pueden responder a un contexto determinado, con un estado emocional determinado o a un cambio de opinión suscitado por el más inesperado acontecimiento.
Así que no las pido, aunque me lo hayan aconsejado cientos de veces profesionales del marketing.
Personalmente, prefiero esperar la ocasión en que llegan de manera inesperada.
Hoy no quiero dejar pasar la oportunidad de compartir contigo una de esas ocasiones..
El año pasado contactó conmigo un colega de profesión que me conocía.
Conocía a una empresa alimentaria que estaba creciendo muy rápido y que a la vez estaba sintiendo el vértigo de tal crecimiento.
El comité de dirección no sabía muy bien qué hacer ni a quien recurrir.
Le dije que me gustaría hablar con el gerente.
Tras dos reuniones y tras tener una foto de lo que estaba pasando en la empresa les dije que podría ayudarles y la mejor forma era con un servicio de interim manager.
Ni que decir tiene que el nudo del problema no estaba donde ellos creían que estaba así que hubo que hacer un abordaje más global.
Creían que el problema y la solución estaba en el área de fabricación.
Nada más lejos de la realidad. Necesitan consultoría de seguridad alimentaria, mejora de procesos y apoyo en la estrategia propia de empresa alimentaria.
Se trataba de una empresa relativamente nueva, sin experiencia gerencial por parte de los socios.
Su problema era que estaba creciendo muy rápido.
¡Bendito problema!!
El reconocimiento por el trabajo realizado llegó en forma de whatsapp el 1 de enero de este año.
Lo puedes leer en la imagen.
Aclaración: La palabra » abajo» se refiere a la planta de fabricación. Las oficinas estaban arriba y la fabricación abajo.
PD: Sé que eres una persona sabia y que has detectado el error gramatical del texto 😉.