No he podido resistirme a escribir este artículo y colarlo antes de la publicación de otros artículos que tengo en mente.
Esto surge a raíz de un artículo que leí la semana pasada de la respetable Harvard Business Review. Hablaba del panorama laboral presente y futuro al que se enfrentan muchos candidatos que se postulen a los nuevos puestos de trabajo que surgen en las empresas. . Hablaba de que para cubrir esos nuevos puestos de trabajo se requieren personas con un perfil híbrido, sin olvidar y reconocer que dicho candidato deberá dominar una materia al menos. Cada vez menos se requerirán ingenieros, economistas, analistas financieros, informáticos a secas.
En su lugar se piden y se pedirán profesionales híbridos como: un abogado tecnológico, un redactor digital, un tecnólogo forense, un profesor teatral, un veterinario gestor, un mecánico- electricista, fotógrafo de alimentos, médico deportivo, periodista investigador y muchos otros perfiles híbridos que se nos pueden ocurrir.
Me ha parecido muy acertado el ejemplo que se cita de un directivo cuya empresa se dedica a la fabricación de motores para aviones. Lo que demandaba este directivo era que todos sus especialistas, desde ingenieros de materiales hasta ingenieros de diseño fuesen buenos en su campo pero sobre todo demandaba que todos ellos pensasen en cómo encajar sus trabajos en el resultado final que es un motor de avión y que todos ellos tuviesen en mente y en todo momento la premisa vital de que un avión debe poder mantenerse en el aire.
Llevándolo a mi terreno, si me permitís el ejemplo, y haciendo una analogía , un directivo de empresa alimentaria que se precie, demandaría responsables de calidad, responsables de producción, responsables de desarrollo de productos, responsables de mantenimiento que fuesen buenos en sus actividades pero también que supiesen encajar sus actividades en todo el entramado global de la empresa y en especial que todos tuviesen en mente y en todo momento los principios de seguridad alimentaria.
Según un estudio al que se hace referencia, los candidatos más demandados son aquellos que saben liderar equipos de personas con diferentes conocimientos con la habilidad de entender y coordinar este equipo y a la vez con una visión global de saber dónde encaja cada tarea de cada persona dentro del objetivo a cumplir.
En dicho artículo se concluye que la universidad se debe adaptar a las demandas laborales del mercado laboral actual. Personalmente no puedo estar más de acuerdo sin embargo no creo que esta conclusión sea novedosa. Esto se viene diciendo desde hace años. Es más ¿ nos acordamos de aquel sistema educativo español en el que se promovía la Formación profesional ( no recuerdo si fue en mi época de EGB o fue posterior) en un intento de acercar la educación académica al mundo del trabajo?
Por otro lado, en dicho artículo se comentan sugerencias de cómo debe cambiar el sistema educativo universitario, qué competencias introducir, que conocimientos mezclar, etc para que los estudiantes que acaban sus estudios estén preparados para cubrir estos nuevos puestos.
Al acabar de leerlo me dije a mí misma eso de ¡Cuántas veces no vemos lo que tenemos delante! ¡Cuántas veces nos empeñamos en invertir tiempo y dinero para llegar a un punto donde ya estábamos!
En mi mundo, todo lo anteriormente dicho se reduce a la especialización por sector empresarial, a tener visión global del negocio y haber adquirido habilidades sociales que te permiten trabajar “con personas”. Y sinceramente creo que esto se va desarrollando con los años de experiencia y con experiencias.
Con este pensamiento personal, al acabar de leerlo escribí un comentario que quiero compartir con vosotros:
“Mientras no llega ese momento en que el sistema educativo pueda responder a las necesidades y demandas laborales del mercado de hoy ( si es que llega , si es posible y si realmente es necesario) por favor miremos y busquemos los candidatos para esos nuevos puestos en profesionales que ya han pasado la barrera de los 40 y que están bien equipados de conocimientos, de competencias , de una visión de empresa y de lo que es la vida”. Para quien no se haya dado cuenta, los 40 y 50 de hoy son los 30 de antaño.
Dicho esto yo me pregunto ¿donde reside el éxito para encontrar el talento que necesitamos? ¿En cambiar el sistema educativo o en saber buscar?
No me cabe duda de que muchos de los que estáis leyendo esto sois perfiles profesionales híbridos.
Autor: Esther Vázquez Carracedo directora de EV Consultoría Alimentaria.
Interim Manager para Empresas e Inddustrias Alimentarias
Desarrollo y Ejecución de Proyectos de Mejora Continua ( Lean Manufacturing) en la Empresa Alimentaria.
Especialista en Gestión de Calidad y Seguridad Alimentaria ( APPCC, IFS, BRC, FSSC22000), Legislación Alimentaria, Etiquetado de Alimentos e Innovación Alimentaria.
Contacto: ev@evconsultoriaalimentaria.com o llamando al 690 632 520
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